En los últimos meses, hemos visto cómo debido al uso del gas como arma por parte de Rusia, su precio se ha disparado y, como un efecto dominó, también lo ha hecho la factura de la luz en los hogares de casi todo el mundo.
La Unión Europea está sufriendo las consecuencias y desde las instituciones, con el foco siempre puesto en mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos, el trabajo se centra en apoyar a los países miembros, las familias y las empresas para garantizar que estas subidas les afecten en la menor de las medidas posible, al tiempo que no se descuida la hoja de ruta marcada por el Pacto Verde Europeo.
El apoyo a las energías renovables, la transición hacia un modelo más verde o la creación de un mercado energético común son algunas de las propuestas y medidas adoptadas en los últimos meses para hacer frente a la crisis energética.
Las medidas de la Unión Europea contra la crisis energética
Desde la Unión Europea se lleva años trabajando para construir un futuro más verde y que no dependa de los combustibles fósiles. Objetivos que se materializaron en el Pacto Verde Europeo de la Comisión von der Leyen. Para luchar contra el cambio climático se pretende convertir a Europa en el primer continente climáticamente neutro para 2050 con edificios renovados y eficientes que sigan los principios de la Nueva Bauhaus Europea, un mayor uso del transporte público o una industria más resiliente.
Además de esto, La Comisión Europea ha diseñado un proyecto específico para hacer frente a la crisis energética actual: REPowerEU; un plan con puntos clave como el ahorro de energía, la producción de energía limpia y la búsqueda de una mayor diversificación en el suministro. REPowerEU también se centra en nuevas oportunidades para el sector energético europeo, como el hidrógeno o el desarrollo de mejores tecnologías para aprovechar el agua, el sol o los biocarburantes.
Otra de las medidas europeas, es la propuesta de un mercado energético común de la UE para la compra conjunta de gas y garantizar, así, su suministro a los ciudadanos e industria de todos los Estados miembros.
Además, los ciudadanos europeos pueden favorecerse de los fondos NextGenerationUE que, entre otros objetivos, pretende favorecer la transición climática, la lucha contra el cambio climático o la protección de la biodiversidad mediante la investigación, innovación y ayudas económicas que aportan.
Energías renovables y por qué apostar por ellas
El paso a las energías renovables y que generen emisiones cero es progresivo. Por eso, algunos de los pasos, como invertir en mejores infraestructuras o acelerar la implementación de mejores sistemas renovables, se están llevando a cabo al mismo tiempo que se produce la reducción del consumo de combustibles fósiles.
¿Pero, qué alternativas ofrece Europa a las energías tradicionales? Energía solar, geotérmica, basada en hidrógeno, eólica… Aquí tienes más información:
- Energía eólica: estos molinos se integran en zonas ventosas. Mediante el giro de sus aspas generan electricidad que se usa y comercializa en tiempo real.
- Energía solar: incorporada sobre todo en países con más horas de sol, como puede ser España. Estas placas reciben el sol y mediante poderosas y desarrolladas instalaciones distribuyen la electricidad a toda la población.
- Energía geotérmica: utiliza el calor del interior de la Tierra.
- Energía hidráulica: esta se aprovecha del movimiento del agua para generar electricidad mediante el uso de turbinas.
- Energía mareomotriz y undimotriz: mediante el aprovechamiento del curso de las mareas y las olas.
- Bioenergía: utilizando biomasa (desechos producidos por humanos y animales) además de restos naturales como plantas y árboles.
- ¿Y el hidrógeno? Desde la Unión Europea se entiende el hidrógeno como uno de los combustibles del futuro, incluso dentro de la estrategia de Europa respectiva al hidrógeno existe el firme propósito de fomentar un ecosistema de investigación e innovación de la infraestructura y que tiene como objetivo incorporar el hidrógeno en las posibilidades energéticas.
Ahora ya sabes un poco más sobre las energías renovables. Ahora te explicaremos cómo ahorrar dinero reduciendo el consumo y cómo ayudar al medio ambiente. Las ideas de hoy ayudan a construir un mejor futuro.
Diez tips para ahorrar energía en invierno
Con la llegada del invierno aumenta el consumo de electricidad: la cantidad de horas de luz es menor y las temperaturas son inferiores, por lo que la calefacción y la luz están más horas encendidas.
Pero este consumo puede ser menor si introducimos pequeños hábitos de ahorro en nuestro hogar. Aquí tienes algunos consejos para ahorrar en tu factura de la luz y, de paso, ser más respetuoso con el planeta. Son únicamente diez, pero puedes incorporar más de tu propia cosecha:
- Reemplaza tus bombillas halógenas por unas LED. Este tipo de iluminación supone una mayor inversión inicial, pero en poco tiempo se amortiza. La diferencia es abismal: una bombilla LED consume un 80% menos que una bombilla halógena.
- Apaga los aparatos electrónicos por completo. El modo standby, característico muchas veces por luces rojas o verdes, gasta luz. ¡Sí, si tienes incluso tu cargador del móvil enchufado siempre, estarás desperdiciando electricidad! Por tanto, apaga por completo tus dispositivos, sobre todo los electrónicos.
- Da una oportunidad a la eficiencia energética. ¡Vale, no podemos vivir sin frigorífico, lavadora, lavavajillas…! Pero, ¿y si apuestas por aquellos que sean más eficientes como los modelos A? ¡Todo por un futuro más verde!
- Bajar la temperatura de la calefacción. Las indicaciones europeas son claras en este aspecto, 19ºC es la temperatura ideal para ahorrar energía. Para no encender por error la calefacción cuando tu hogar esté por encima de esa temperatura y pagarlo después con la factura, es buena idea incorporar un termostato para poder medir la temperatura de tu hogar.
- El agua caliente también gasta luz. Por tanto, es mejor tomar duchas más breves. Primero, derrochamos mucha menos agua y segundo, también electricidad al no hacer que el calentador funcione más tiempo del necesario. Por cierto, ese agua fría que se gasta hasta que sale agua caliente se puede aprovechar, por ejemplo, utilizando un cubo para luego fregar o regar las plantas.
- ¿E invertir en un mejor aislamiento? Hay multitud de opciones y no todas suponen un gran coste. Aquí te dejamos un ejemplo de una empresa española apoyada con fondos europeos que ha desarrollado un sistema completamente sostenible para aislar térmicamente los edificios y que no requiere de un gran desembolso.
- Aprovéchate de una buena tarifa. Esto precisa de encontrar una buena oferta que se adecúe a tu estilo de vida o pagar una cantidad fija al mes puede suponer un ahorro muy fuerte al final del año. ¡Piensalo dos veces!
- Apoya el autoconsumo. Europa da apoyo a todas aquellas familias y empresas que quieran pasarse a un consumo más responsable con el planeta como puede ser la energía solar. Además de esta, hay numerosas alternativas como la bioenergía.
- Cocina eficiente. Una buena opción si quieres ahorrar electricidad es que los últimos minutos de cocción se hagan con la vitrocerámica ya apagada o, con el mismo fuego hacer varias cosas una vez ya está caliente.
- Sé consciente. Generar electricidad agudiza el cambio climático. Por eso es lógico reducir al máximo el consumo de energía. Por ejemplo, cuando estás en el sofá, ¿estás viendo la tele o la puedes apagar?, ¿es necesario tener la luz del salón encendida cuando estás en la cocina?...
Estas son solo algunas de las medidas para que puedas reducir tu consumo de energía en este invierno, algo que agradecerá tu bolsillo y el planeta. Como puedes ver, no cuesta mucho llevarlas a cabo, es suficiente con el compromiso de ser más responsable en tu día a día. ¡Vamos a por un mañana más sostenible!
Fuentes
Detalles
- Fecha de publicación
- 17 de noviembre de 2022
- Autor
- Representación en España