Alrededor de 341 millones de personas utilizan el euro cada día. En la actualidad, es la segunda moneda más utilizada en todo el mundo. No obstante, el euro se ha convertido en algo más que una moneda. Es un símbolo de integración, unidad y fortaleza de los países que forman la zona euro.
El origen del euro
El establecimiento de un mercado común para el comercio ha sido una prioridad para todos los Estados miembros desde la creación de la Unión Europea en 1957. La inestabilidad económica tras la guerra amenazó la estabilidad del sistema de precios comunes de la política agrícola común. En 1979 se estableció el Sistema Monetario Europeo (SME).
Este supuso una coordinación entre las políticas monetarias de los diferentes países de la UE no vista hasta la fecha. Bajo la presidencia de Jacques Delors, se establecieron las pautas para alcanzar una Unión Económica y Monetaria. De este modo, en 1991 los Estados miembros firmaron en el Tratado de la Unión Europea, firmado en Maastricht, en el que se establecieron las disposiciones necesarias para contar con una moneda única y común.
El euro se introdujo oficialmente el 1 de enero en 1999. En sus tres primeros años de vida, estuvo reservada a efectos contables y pagos electrónicos. No fue hasta el 1 de enero de 2002 cuando se pusieron en circulación las monedas y billetes en que marcarían el mayor cambio de moneda de la historia en los 12 países de la Unión Europea. Actualmente, el euro se emplea en 20 de los 27 Estados miembros y en Andorra, Mónaco, San Marino y Ciudad del Vaticano. Juntos constituyen la llamada zona euro.
Es el Banco Central Europeo la institución que gestiona el euro, aplica la política monetaria de la UE y se encarga de mantener la estabilidad de los precios. Junto con la Comisión Europea, deciden qué países candidatos a formar parte de la zona euro cumplen las condiciones para adoptar la moneda.
Los beneficios del euro
El euro ofrece numerosas ventajas, tanto para los ciudadanos a nivel particular como para las empresas y negocios. La moneda única implica una mayor estabilidad de los precios y unos mercados financieros mejor integrados y, por tanto, más eficientes. Con ello, las empresas se mueven en un mercado más seguro en el que establecer relaciones comerciales con el resto del mundo.
Otra de las ventajas más importantes del euro es que ha eliminado las fluctuaciones de los tipos de cambio dentro de la zona del euro. Con ello, se evitan los riesgos derivados de los cambios de moneda y favorece la actividad empresarial y la inversión entre países.
Fuera de la Unión Europea, contar con el euro como moneda única hace la región más atractiva para hacer negocios, fomentando el comercio extracomunitario. Hoy en día, el euro es la moneda elegida para casi el 40 % de los pagos transfronterizos mundiales y para cerca de la mitad de las exportaciones de la UE en todo el mundo.
Las normas económicas y presupuestarias actuales de la Unión Europea favorecen la estabilidad y crecimiento económico de la zona UE. Por otro lado, el euro es la herramienta fundamental para maximizar los beneficios del mercado único, la política comercial y la cooperación.
Detalles
- Fecha de publicación
- 20 de marzo de 2024
- Autor
- Representación en España